Las ideas valen mucho.
La forma de llevarlas acabo, mucho más.
Aquí te mostramos unas ideas que pueden hacer que tu negocio triunfe.
1. Ponle pasión a tu idea
Si tu único objetivo es ganar dinero, olvídalo.
El dinero puede ser un gran motivador, pero no lo es todo.
¿Te apasiona de tal manera que de aquí a 10 años te sigues viendo trabajando en el proyecto?
2. Hazlo sencillo
Las grandes ideas llueven, no nacen.
Mark Zuckerberg no se levantó un buen día y dijo: “Voy a crear una red social…”
Todos los grandes negocios de nuestro tiempo han empezado por una idea simple y después, se ha hecho grande.
3. Explícalo en una frase
Cuando estás desarrollando una idea start up, te pasarás mucho tiempo contándola.
Si la puedes explicar en una sola frase, de 10 palabras ó menos, tus posibilidades de éxito aumentarán.
Empieza aportando la solución a un problema, con un producto, para un cliente
4. Sólo una línea de negocios
Pon el foco en la línea adecuada.
Monetiza sólo una cosa de cada vez
Lo complicado vendrá sólo.
5. Conoce al Cliente
Necesitas interactuar con personas, conocer sus necesidades, saber todo sobre él / ella.
Es tu laboratorio de pruebas real. Aprende de tus clientes. Escúchalos.
6. Conoce el Mercado
Tienes que ser el mejor experto del área.
Conocer a la competencia como a ti mismo.
Conoce el terreno y ganarás la batalla.
7. Convierte en Pocos pasos
Simplifica la tarea de tus clientes.
Tienen que convertir la venta en pocos pasos, de manera muy sencilla.
Más de tres clicks? Nunca.
8. La salsa secreta
Intenta que lo que haces sea tan distinto, especial y auténtico, que nadie te lo pueda copiar.
Transforma tus ideas, proyectos y negocios en únicos.
9. Reinvéntate cada día
Desmonta tus ideas, cambia cosas.
Elimina pensamientos positivos. Elimina pesos innecesarios.
Haz las cosas de otra manera.
10. Comparte tus ideas
Comparte tus pensamientos, dudas, negocios y proyectos.
Encontrarás que otros lo ven de otra manera, encontrarás fallos antes que se produzcan, y nuevas oportunidades antes de probar.
No tengas miedo. Las ideas que no se ejecutan no valen nada.